Un domingo cualquiera 
22 febrero 2006, 12:45 p. m.. Enlace Permanente

Pero antes de eso hicimos una parada técnica en Castañeras, en casa de Nuria, para conocer el pueblo, su playa, comer y reirnos un poco. No, no; nos reimos muchísimo. Llegamos y después de guardar la comida que llevávamos, nos pusimos a jugar al Piccionary. La verdad es que yo no estaba muy por la labor porque no me van esos juegos, pero tengo que reconocer que nos lo pasamos de miedo.
Me reí hasta hartarme, sobre todo cuando tuve que, con la ayuda de Ramón, que hacia de marioneta, representar un gremmli. Hay fotos pero estan guardadas bajo llave.

Dispusimos la comida en la mesa, cada uno lo que había llevado para compartit y nos dimos una buena pitanza. A la sobremesa, nos acordamos del partido y nos fuimos con un poco de prisa, pero llegamos antes de que empezase el partido

Una gran anfitriona. Nos preparó un chocolate excelente que nos quito el frio a todos. Lo acompañamos con las sobras de la pitanza y unas rosquillas, hechas por ella, cojonudas. A eso de las 20.30 p.m. nos vinimos otra vez para Gijón. Algunos dormimos en el viaje de regreso.
Pero tengo que decir que pasamos un gran dia. Lo pasamos genial, reimos como nunca y recordamos viejos tiempos. "Un domingo cualquiera" un gran dia.
Comentar...